martes, 7 de octubre de 2008

Cortitas y el pie (3-3-3)

Tres ganados, tres empatados, tres perdidos. Se podría decir que estamos ante un Quilmes irregular, mediocre, que desilusiona... O, después del triunfo del jueves, la mirada puede ser diferente: un Quilmes que se está acomodando, en formación y que dará que hablar...
Es muy difícil analizar a este equipo. Parece que tiene tantas caras como partidos juega y ni siquiera demuestra un carácter similar en sus presentaciones.

Lo que se ve es que -después de la casi imposible de empeorar imagen que dejó en las primeras fechas- es un equipo con ganas. Que reconoce que no es positivo lo que logra pero que aún así reniega de resignarse y trata de seguir adelante.

Los jugadores bancan al DT y eso es positivo. Deberían lograr una racha que sirva de estímulo para los golpeados hinchas y para creer que pelear el campeonato no es una utopía...

Una comparación con absoluto nivel personal me lleva a hacer un breve análisis: mi hermano es hincha de Independiente, además viví 22 años en Avellaneda. Por lo tanto, los dos equipos de la ciudad siempre estuvieron "bajo el radar" (mi mejor amigo además es de Racing).

Este Quilmes creo que se parece bastante a este Independiente en diferentes aspectos. 1) Ninguno de los dos tiene el mejor presupuesto de la categoría, pero ambos arrancaron con toda la ilusión de pelear por el título. 2) Los dos mantuvieron la base y se reforzaron en forma conveniente. 3) Los dos tuvieron (Claudio Borghi se tuvo que ir) entrenadores que eran respaldados por los hinchas. 4) Los dos arrancaron complicados y sin escontrar un patrón de juego (aunque suene fea esa frase).

La gran diferencia, insisto, es que los jugadores de Quilmes (con muchísimos errores a cuestas, claro) se matan por defender al DT. Y eso, teniendo en cuenta los últimos antecendentes en el club, no es poca cosa. Es un punto a favor que durante años no se pudo disfrutar (incluso durante gran parte del año del último ascenso a Primera).


Lo que dejó el partido ante Instituto (y algo más)

Triunfo: El Cervecero se presentó con un "nuevo-viejo esquema (3-4-1-2)" y logró un triunfo importantísimo en una cancha difícil (2ª victoria en 15 presentaciones). La actuación en defensa no fue brillante (pero sí la de Ramiro Fassi), el mediocampo impuso su ritmo (sobre todo gracias al despliegue de Marcelo Guzmán, también sobresalió la tarea de Sebastián Luna) y qué decir del ataque... Lo de J Morales es cada vez más destacado, impresionante.

El maldtio reloj: Duró poco y tal vez no fue para tanto, pero se sufrió un poco más en esos momentos en que el reloj de la TV quedó clavado en 39.19.

Pasajero 19: Que Ricardo Aparicio haya dejado de lado un par de días libres para ir a acompañar al equipo demuestra que hay solidaridad y ganas de mantener unido al plantel. Eso no es poco para una institución en la que durante años fueron muy pocas las veces en que se vieron esos gestos.

Seguidilla clave: Se viene el último (Los Andes), el "Quilmes del interior" (Independiente Rivadavia, qué parecida su temporada a la del Cervecero) y uno de los de punta (Chacarita). Es el momento para trepar posiciones.

Firpo: interesantísima entrevista a Marcelo Firpo, ex jugador y actual DT de juveniles e infantiles en el Cervecero, en la página amiga (y ultrarecomendable) xenen.com.ar (ver acá).

Foto: Juan José Morales avanza mientras detrás de él se ve la leyenda "históricos" en una bandera. Nunca una mejor palabra para calificar a sus goles...

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